Y a los 30, mamá

Esta semana pensaba escribir acerca de como adaptar la moda y las tendencias a nuestra vida cuando hay que salir con los niño, ir al parque etc. pero lo voy a tener que de dejar para la semana que viene porque no me ha dado tiempo de preparar nada ya que el Rubio y yo hemos estado malitos en casa. Él con una llaga que le ha salido en la boca unido a que le están rompiendo cuatro dientes y una muela así que ha pasado estos días muy quejicoso, llorando por todo, comiendo muy poquito porque le molestaba y con más mamitis de lo habitual. Y yo con un super resfriado que aun no se acaba de ir, con muy mal cuerpo y con el chiqui siempre en brazos. Menos mal que mi santa madre ha venido estos días ha echarme una mano, hacer comidas, ocuparse del Pelirrojo, etc. porque sino mi casa hubiera sido un caos total. Espero que vuestra semana haya sido un poco mejor! Besos!

Hemos pasado el fin de semana un poco regular. El peque empezó con fiebre el viernes por la tarde y se mostraba muy molesto. La noche nos la pasamos los dos casi en vela porque a él le costaba dormir, estaba quejicoso, molesto y solo quería estar en brazos. El sábado más de lo mismo ¡incluso rechazaba el chupete! y además se cayó en casa y se hizo una pequeña herida en el labio así que ya al pobre le dolía todo y por todo lloraba. Le estuvimos dando apiretal, dalsy y el gel para los dientes que lo alivia mucho y por la tarde se encontraba un poco mejor pero la noche volvió a ser toledana... Para empezar tuve que dormirlo en brazos cuando él no ha querido dormir en brazos nunca, ni de recién nacido. Cuando se dormía y lo iba a echar en la cuna, notaba la separación y vuelta a llorar y a los brazos de mamá, así que al final opte por meterme en la cama con él a ver si así se dormía porque necesitaba el contacto físico constante, y funcionó, pero a la media hora de irme...